Alberto Rodríguez, director
Cuando el proyecto comenzó y Domingo Corral de Movistar+ nos hizo llegar su interés para que desarrolláramos una serie no teníamos absolutamente nada. Únicamente una idea, muy escueta, que de una manera recurrente nos regresaba una y otra vez en los descansos de las jornadas de escritura de guión y de la que hablábamos muchas veces Rafael Cobos y yo: ¿cómo sería esta ciudad cuando era económicamente la más importante del Imperio? Siempre fantaseábamos con la posibilidad de caminar unos minutos por esa ciudad, aquella que hoy es la ciudad donde vivimos. Pensamos que sería un escenario fantástico para desarrollar un thriller.
Luego la historia fue haciéndose más y más rica a medida que íbamos buceando en la documentación, como si hubiésemos entrado en un mundo nuevo con unas reglas nuevas. Sevilla de pronto, se revelaba como un universo paralelo con unas reglas distintas y muy alejada de cualquier visión que hubiéramos podido tener en un principio.
A medida que las historias reales nos iban atrapando iban apareciendo más y más personajes: Monardes, Teresa, Eugenia,... fue creándose una trama cada vez más compleja que nos obligó a llevar la historia hacia algo más coral, y terminar intentando hacer una especie de fresco en torno a la ciudad y a aquella época.
Siempre tuvimos claro que queríamos rodar una historia sobre personajes anónimos, quizás hemos visto muchas historias de intrigas palaciegas pero creo que pocas de cómo se organizaba y vivía el ciudadano de a pie. Pretendíamos hacer el recorrido en esta serie de la mano de los personajes. Para eso pensamos desde el principio que debíamos abordar todo de una manera realista, buscando la mayor verosimilitud posible.
Este ha sido, sin duda, el rodaje más complicado que he abordado nunca. Era una serie compleja porque ha requerido que nos organizáramos muy bien para rodar en multitud de decorados. También ha sido el rodaje más largo que nunca hemos abordado, en cuanto a días de trabajo, una auténtica maratón. Por el ritmo que demandaba la historia y por lo que tratábamos de abarcar con ella, hemos tenido que trabajar muy duro para que todas las piezas estuviesen en su sitio.
A la dificultad normal de un rodaje complejo como este, ha habido que añadir la complejidad de tener que inventarnos una ciudad que no existía ya hoy en día. Ha habido un gran trabajo de todos los departamentos para resucitar de una manera u otra esa ciudad.
Elegimos al principio y siguiendo nuestra pretensión de ser verosímiles, seguir un poco el espíritu de determinadas películas de Pasolini y trabajar con rostros menos conocidos. Para ello se hizo un casting muy exhaustivo (lo hicieron Eva Leira y Yolanda Serrano) y de este casting salieron los rostros de Mateo (Pablo Molinero) Valerio (Sergio Castellanos), Teresa (Patricia López Arnaiz), Leandra (Lupe del Junco), Eugenia (Cecilia Gómez)
Además de ellos hemos contado con actores consagrados y conocidos por el gran público como: Paco león, Paco Tous, Manuel Solo, Tomás del Estal,....
La verdad es que ha sido un placer trabajar con todos. Con los principales, con los que compartí más tiempo: Pablo, Sergio, Patricia, Paco (Tous y León), Tomás, Manuel,.... y con los que han tenido menos sesiones: Jesús Carroza, Manuel Morón, Fany De los Santos, Antonio Dechent, Antonio Gil,....
Es una serie muy coral y con muchos personajes. Por ello, fuimos muy exigentes con los ensayos. Ensayamos mucho y fuerte para evitar problemas y dudas a la hora de rodar. He disfrutado mucho del trabajo con los actores. Como ya he dicho, creo que todos están muy bien. Les agradezco mucho su dedicación y compromiso con la serie.
Desde hace muchos años y unas cuantas películas he tenido la suerte de tener como compañeros de aventura a un equipo técnico de una gran calidad humana y artística. En esta serie se han sumado a este equipo de siempre nuevos colaboradores que le han dado un enorme empujón a la serie. Hemos sido un pequeño ejército muy bien avenido.
Una serie tan compleja sería impensable sin las aportaciones y el trabajo de un grupo numeroso de profesionales que han dado lo mejor de sí mismos durante la preparación, el rodaje y la postproducción. Quiero destacar el trabajo de todos ellos, su dedicación entusiasta y su disposición.
Alberto Rodríguez